Una de las claves del éxito en el pasado de HTC radica en la elaboración de teléfonos con diseños atrevidos. Un excelente ejemplo es el HTC Legend, que es fabricado en un solo bloque de aluminio y del cual se inspira el HTC One V.
Con un elegante color negro, la superficie de metal del equipo posee una rugosidad agradable al tacto, que además absorbe la humedad, repele las huellas dactilares y proporciona un mejor agarre.